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Polemizando

PRIMERO HAY QUE EXPLOTAR LAS TIERRAS LIMPIAS

PRIMERO HAY QUE EXPLOTAR LAS TIERRAS LIMPIAS


En el pasado congreso de la ANAP el compañero Raúl Castro al intervenir sobre el tema del Marabú, dijo que no se trata de  estar poniendo fechas a las tareas que después no se puedan cumplir y enfatizó su confianza en el esfuerzo que harían los campesinos. Y se está demostrando, porque los que han recibido tierras por el decreto 259 han limpiado miles de hectáreas con sus propios brazos.  En una reciente reunión escuché cosas muy interesantes: hay que entregar la tierra limpia que está ociosa o deficientemente explotada en primer lugar. Genial conclusión. El marabú que ha crecido durante decenas y decenas de años no lo podemos eliminar en un abrir y cerrar de ojos, lo que si resulta inconcebible es que sigamos teniendo tierras aptas, limpias y no se exploten correctamente. Cuando se comience a aplicar el impuesto sobre las tierras ociosas, se va a multiplicar el área disponible para ser entregada. No resulta fácil para quien comienza nuevo en la dura faena agrícola tener que comenzar de cero limpiando una caballería de marabú, cuando a veces no tiene dinero ni para adquirir los más elementales medios de trabajo. Sin embargo, si una familia asume tierras limpias y las pone a producir, al año ya empieza a tener solvencia y motivación para enfrentar esa tarea mucho más difícil. Se han entregado en Villa Clara cerca de 90 mil hectáreas, pero no albergo la menor duda de que la superficie ociosa o mal atendida es muy superior. Porque existen directivos de empresas, granjas, UBPC y CPA que hablan orgullosos de su gran patrimonio de tantas caballerías, cuando la única tierra que vale es la que produce. Algunos tienen cuatro vacas flacas en una caballería y dicen que la están explotando. Engañan y se autoengañan ellos mismos. Un levantamiento serio sobre la explotación de la tierra debe incluir la carga de animales por área o de rendimiento mínimo a obtener en los diversos cultivos por hectárea. Para motivarse a ir hacia el campo por otra parte, el nuevo productor debe tener confianza de que la tierra no es por diez años, sino mientras la explote adecuadamente, que su hijo tendrá preferencia para heredar el usufructo y hasta que pueda hacer su vivienda confortable allí en la finca para establecerse con carácter definitivo. Todo esto, puedo asegurarlo, se está analizando muy en serio para adecuar la legislación, porque la estrategia del país para hacer producir la tierra es muy seria también.

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